Preparación:
- Preparación del Caramelo:
- En una sartén a fuego medio-alto, combina 1 taza de azúcar con 1/2 taza de agua. Cocina sin remover hasta que el azúcar se disuelva completamente y adquiera un color ámbar oscuro. Este proceso debería tomar aproximadamente 10 minutos. Es crucial no remover la mezcla para evitar la cristalización del azúcar.
- Una vez listo, distribuye el caramelo de manera uniforme en dos moldes redondos para pastel de 9 pulgadas previamente engrasados y enharinados. Este paso es fundamental para lograr la capa de caramelo perfecta en la base de nuestro pastel.
- Preparación del Bizcocho:
- Precalienta el horno a 350°F (175°C).
- En un tazón mediano, mezcla la harina, el polvo de hornear y la sal. Estos ingredientes secos serán la base de nuestro bizcocho, proporcionando la estructura y esponjosidad deseada.
- En otro tazón, bate la mantequilla con 1 taza de azúcar hasta obtener una mezcla suave y esponjosa. La clave aquí es batir bien para incorporar aire a la mezcla, lo que contribuirá a la textura aireada del bizcocho.
- Añade los huevos uno a uno, asegurándote de batir bien después de cada adición. Incorpora el extracto de vainilla, añadiendo un sutil pero distintivo sabor que complementará el caramelo.
- Agrega la mezcla de harina en tres partes, alternando con la leche, comenzando y terminando con la harina. Es importante mezclar hasta que los ingredientes estén justo combinados para evitar sobrebatir la masa, lo que podría resultar en un bizcocho denso.
- Horneado y Montaje:
- Divide la masa de manera uniforme entre los dos moldes preparados, asegurándote de alisar la superficie con una espátula.
- Hornea durante 25-30 minutos o hasta que al insertar un palillo en el centro, este salga limpio.
- Deja enfriar los pasteles en los moldes durante 10 minutos antes de desmoldarlos, colocándolos en platos de servir con el caramelo hacia arriba.
- Permite que los pasteles se enfríen completamente antes de servir. Este paso es crucial para que el caramelo se asiente y se distribuya uniformemente.
Este Pastel de Caramelo es más que un simple postre; es un testimonio de la riqueza de la repostería y su capacidad para unir a las personas a través de sabores y tradiciones compartidas. Al seguir esta receta, no solo estarás creando un delicioso pastel, sino también participando en la celebración de la historia y la cultura culinaria.
