Preparación:
- Preparación de la Base: Comienza precalentando el horno a 180°C y engrasa un molde para pastel con un poco de aceite o mantequilla, espolvoreando ligeramente con harina para evitar que se pegue. Esta base garantizará que tu pastel se desmolde perfectamente, manteniendo su hermosa forma marmolada.
 - Mezcla de Sabores: En un pequeño recipiente, mezcla el cacao en polvo con tres cucharadas de leche hasta obtener una pasta suave y sin grumos. Esta mezcla será la clave para lograr el intenso sabor a chocolate que caracteriza a una de las capas del pastel.
 - Creación de la Masa: En un bol grande, bate los huevos con el azúcar hasta que la mezcla se vea pálida y espumosa, lo que aportará ligereza al pastel. Añade el aceite y la leche restante gradualmente, mezclando bien después de cada adición. Incorpora la harina y la levadura en polvo, mezclando hasta que la masa sea homogénea y sin grumos.
 - División y Coloración: Divide la masa en dos partes iguales. A una de ellas, añádele la mezcla de cacao y leche, mezclando hasta que esté completamente integrada. A la otra mitad, incorpora el extracto de vainilla, mezclando bien para distribuir el sabor uniformemente.
 - Técnica Marmolada: Vierte las masas alternadamente en el molde preparado, usando una cuchara para crear capas de vainilla y chocolate. Con un palillo o el mango de una cuchara, realiza movimientos en espiral a través de la masa para crear el efecto marmolado.
 - Horneado Perfecto: Hornea el pastel durante aproximadamente 30 minutos o hasta que al insertar un palillo en el centro, este salga limpio. Es crucial no abrir el horno durante los primeros 20 minutos para evitar que el pastel se baje.
 - Presentación y Servicio: Una vez horneado, deja enfriar el pastel en el molde sobre una rejilla durante unos 10 minutos antes de desmoldarlo. Esto permitirá que el pastel se asiente y facilite el desmolde sin romperse.
 
Consejos Profesionales:
- Asegúrate de que todos los ingredientes estén a temperatura ambiente para garantizar una mezcla homogénea.
 - Al batir los huevos con el azúcar, hazlo durante al menos 5 minutos para incorporar aire a la mezcla, lo que resultará en un pastel más esponjoso.
 - Para un efecto marmolado más definido, no mezcles en exceso las masas una vez en el molde.
 
Este Pastel Marmolado de Chocolate y Vainilla es más que un simple postre; es una declaración de amor por los sabores y texturas que hacen de la repostería un arte. Cada bocado te llevará a un viaje de dulzura equilibrada y placer culinario, convirtiéndolo en el complemento perfecto para cualquier ocasión especial.
							