Preparación:
- Preparación de la base:
- Comienza forrando un molde cuadrado de 8″ con plástico que cubra todos los lados para facilitar el desmoldado.
- En un procesador de alimentos, pulveriza las nueces hasta obtener una harina fina. Añade la harina de almendra, psyllium, y las especias para pastel de calabaza, pulsando hasta que estén bien combinados.
- Incorpora las pasas, zanahoria rallada, aceite de coco, y mantequilla de almendra. Pulsa unas cuantas veces más hasta que la masa comience a unirse.
- Presiona esta mezcla firmemente en el molde preparado, asegurándote de que quede compacta y uniforme. Reserva.
- Preparación del relleno:
- En una licuadora, coloca los dátiles, anacardos, agua, aceite de coco, jugo de limón, agave, y granulado de lecitina. Mezcla hasta obtener una crema suave y homogénea. Si es necesario, agrega un poco más de agua para facilitar el proceso.
- Una vez que la mezcla esté completamente homogénea, viértela sobre la base del pastel de zanahoria en el molde.
- Refrigeración y presentación:
- Coloca el molde en el refrigerador y deja enfriar durante 1-2 horas, o hasta que el relleno esté firme.
- Para servir, retira el pastel de zanahoria del molde y, si lo deseas, adórnalo con rizos de zanahoria y nueces picadas para una presentación más atractiva.
Este pastel de zanahoria crudo y vegano no solo es un deleite para el paladar, sino también una fuente rica de nutrientes esenciales, fibra y energía sostenible. Su preparación respeta la integridad de los ingredientes, maximizando sus beneficios para la salud y el bienestar general.
Al elegir ingredientes orgánicos y de origen sostenible, este pastel se convierte en una opción aún más respetuosa con el medio ambiente, alineándose con un estilo de vida consciente y responsable.