Preparación del Pastel
- Preparación Inicial: Precaleentar el horno a 350°F (175°C). Engrasar y enharinar dos moldes para hornear de 8 pulgadas x 2 pulgadas.
- Mezcla Seca: En un tazón grande, tamizar juntos la harina, el azúcar, el polvo para hornear y la sal. Este paso es crucial para obtener una masa homogénea y libre de grumos.
- Integración de la Mantequilla: Añadir la mantequilla, la leche y la vainilla a la mezcla de harina. Utilizar una batidora de mano para batir durante 2 minutos, asegurándote de raspar los lados del tazón ocasionalmente. Esta acción permite que la mantequilla se incorpore perfectamente, aportando esa textura húmeda y suave característica del pastel.
- Incorporación de Huevos: Añadir los huevos y batir durante 2 minutos adicionales. Los huevos deben integrarse uno a uno, permitiendo que cada uno se mezcle completamente antes de añadir el siguiente.
- Horneado: Dividir la masa uniformemente entre los moldes preparados. Hornear durante 30-35 minutos, o hasta que un palillo insertado salga limpio. El horneado debe ser monitoreado cuidadosamente para evitar que el pastel se seque o quede crudo en el centro.
- Enfriamiento: Enfriar en los moldes durante 10 minutos, luego transferir a una rejilla para enfriar completamente. Este paso es esencial para que el pastel mantenga su forma y textura.
Preparación de la Cobertura de Chocolate Perfectamente Chocolate
- Derretir Mantequilla: Comenzar por derretir la mantequilla y luego mezclarla con el cacao. Esta combinación de ingredientes crea una base rica y profunda para la cobertura.
- Añadir Azúcar y Leche: Alternar añadiendo azúcar en polvo y leche, batiendo hasta obtener una consistencia para untar. La consistencia deseada es suave pero firme, capaz de cubrir el pastel sin escurrirse.
- Finalización con Vainilla: Incorporar la vainilla. Este toque final eleva el sabor de la cobertura, aportando un contraste perfecto con el dulzor del chocolate.
Montaje y Decoración
Una vez que el pastel esté completamente enfriado, proceder a untar la cobertura de chocolate sobre la superficie. La cobertura debe ser aplicada con generosidad y extendida uniformemente, creando una capa lisa y atractiva.
Conclusión
Este pastel de mantequilla a la antigua no solo es un homenaje a las recetas clásicas, sino una versión mejorada que garantiza deleitar a todos los paladares. Siguiendo estos pasos cuidadosamente, obtendrás un postre que no solo es delicioso sino también estéticamente atractivo. Perfecto para cualquier ocasión, este pastel promete ser el centro de atención en tu próxima reunión.
